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Informativo Virtual Nº 2005
- Fujimoristas pedirán anular sentencia de Fujimori. Martha Chávez respalda fallo a favor del grupo Colina. Carlos Rivera asegura que Villa Stein redujo penas a Colina y luego explicó “cualquier cosa”.
- El juez supremo Víctor Prado Saldarriaga, afirmó que el caso “Barrios Altos fue un crimen de Estado y de lesa humanidad”, debido a que se desarrolló a través de la actuación sistemática y planificada de un órgano conexo al Servicio de Inteligencia del Ejército (SIE).
- “No es un homicidio común, estamos frente a actos que son desarrollados desde el Estado, más grave aún cuando han obedecido a un proceso planificado, a través de estructuras y recursos estatales afirmó el magistrado.
¡EXCLUSIVO! EL PERFIL PSICOLÓGICO DEL VOCAL VILLA STEIN
A pocos días de la polémica sentencia que reduce las penas a los integrantes del comando de aniquilamiento del gobierno fujimontesinista, mejor conocido como el destacamento Colina, autores de las matanzas de Barrios Altos, La Cantuta, del valle del Santa y el periodista Pedro Yauri, hoy se conoce que varios magistrados que integran esta Sala Penal de la Corte Suprema tienen una historia marcada por mentiras y verdades que podrían deslucir su accionar al momento de impartir justicia. Desde evaluaciones psicológicas que denotan problemas de personalidad hasta resoluciones que beneficiaron a procesados por tráfico ilícito de drogas. Una tremenda corte con nombres y apellidos.
Según un informe periodístico (diario La República), la última mentira del presidente de esta Sala Penal, el juez Javier Villa Stein, es haber señalado que el Ministerio Público, en su momento, nunca incluyó en su acusación la comisión de los delitos de lesa humanidad y asociación ilícita, hecho que generó la sentencia que redujo las penas de los integrantes del grupo Colina, incluso a Vladimiro Montesinos. Pero la realidad es otra, hoy se conoce que existen documentos y actas del juicio público, como la acusación fiscal del 11 de mayo del 2005 en donde se toma en cuenta la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que califica estos delitos como de lesa humanidad. Entonces, el juez Villa Stein habría mentido.
EL JUEZ: JAVIER VILLA STEIN
El accionar del juez Javier Villa Stein podría tener una respuesta en un test psicológico del año 2004, que el Consejo Nacional de la Magistratura (CNM) encarga practicar a la Universidad del Pacífico a todos los postulantes al cargo de vocal supremo, entre ellos, el actual presidente de la Sala Penal de la Corte Suprema. Las conclusiones son las siguientes: “Los principales problemas del señor Villa se ubican en el área de personalidad, con señales evidentes de tensión y ansiedad que no logra controlar adecuadamente, y que probablemente interfiera en sus relaciones con otras personas” (Ver test). En su resumen el examen indica: “Se trata de una persona sumamente insegura, dependiente y frente a la adversidad, demuestra pocos recursos para hacer frente a altos niveles de ansiedad”, firman Ivonne Menéndez Carbajal, psicóloga y Martín Otiniano Carbonell, consultor.A pesar de los resultados fue elegido Vocal Supremo de la República, y en el 2008 presidente del Poder Judicial. Sin embargo, parece no haber superado los problemas psicológicos del test del 2004, pues todavía continúa cometiendo excesos verbales, con constantes ironías y gestos de ‘figuretismo’. Es Magister y Doctor en Derecho con mención en Ciencias Penales, así como profesor principal en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos.
En los años ochenta defendió a los policías involucrados en la muerte de Ángel Díaz Balbín ahorcado con una correa por el seudopsicólogo Mario Poggi (una persona con evidentes desequilibrios psicológicos). En la década de los noventa sostuvo en diversas entrevistas en medios de comunicación, sobre todo en los diarios de los hermanos Wolfenson donde indicaba que, “los vladivideos no constituían pruebas válidas por ser grabados de forma ilegal”. Asesoró a los hoy condenados, el general José Villanueva Ruesta y Blanca Nélida Colán y Alberto Kouri. Un verdadero defensor del fujimontesinismo y en algún momento, aunque parezca increíble, lanzó la posibilidad de postular a la presidencia de la república.
EL JUEZ: SEGUNDO MORALES PARRAGÜEZ
En enero del 2005, el actual juez supremo Segundo Morales Parragüez fue seriamente cuestionado por su actuación como integrante de la Primera Sala Penal de Reos Libres de la Corte Superior de Justicia. Durante el proceso de evaluación y ratificación en los cargos se denunció que actuó de forma indebida al declarar procedente la restitución de un inmueble perteneciente a Epifania Ruiz Solier, procesada por tráfico ilícito de drogas en agravio del Estado. Algunos miembros de la comisión evaluadora en este proceso, entre ellos los magistrados Vladimir Paz de la Barra y Luz Marina Guzmán Díaz, votaron para que no se ratifique a este magistrado. Sin embargo, Morales Parragüez pudo ratificarse. Hoy es miembro de la corte que decidió reducir las penas a los miembros del grupo Colina.
EL JUEZ: JOSUÉ PARIONA PASTRANA
Este magistrado supremo ha sido inflexible ante la corrupción y presidió el tribunal que juzgó a la modelo Malú Costa y a Giuliana Llamoja. Su hoja de vida señala que estudió en la Universidad Federico Villarreal, pero extrañamente solo menciona el grado de Bachiller. Consigna maestrías en Ciencias Penales en la Universidad San Martín y un doctorado en la Villarreal, sin contar con el título universitario.
Inició su carrera profesional en 1978 cuando es nombrado juez de paz letrado del Callao. En los 80 ejerció el cargo de juez especializado provisional penal y civil también en el primer puerto y desde 1983 fue nombrado como magistrado especializado en la erradicación de cultivos de hoja de coca y juez especial para casos de terrorismo, de esta época existen varias denuncias que lo involucraban en la liberación de detenidos por terrorismo y narcotráfico a cambio de cupos, denuncias que fueron posteriormente desestimadas. Este juez es evangélico.
EL JUEZ: JORGE SALAS ARENAS
Es el último de los integrantes de la Sala Penal Permanente de la Corte Suprema de Justicia, cuenta con quince años de labor judicial, iniciándose como vocal de la Corte Superior de Justicia de Arequipa. Formó parte de la Corte Especial para Juzgamientos de tráfico ilícito de drogas en la ciudad Blanca y presidente de la Sala de Apelaciones donde se inició la utilización del nuevo Código Procesal Penal. Su carrera es impecable.
Julio 26, 2012 ERIC PEREIRA - UNIDAD DE INVESTIGACIÓN: epereira@diario16.com.pe
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