CHILE NOS INVADEN Y NO HACEMOS NADA (III)

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Informativo Virtual Nº 1479

• Realmente preucupante este articulo que nos brinda el Diario El Men del Peru. Allí detalla, como inteligentemente y sistematica penetran los chilenos(apertuta de mercado, TLC), mientras que los peruanos seguimos creyendo que un nuevo asalto al Peru es inimaginable; que chile compra armamento para jugar a la guerrita, que su potencial enemigo es Argentina, Venezuela o algún país del África, sus necesidades de agua y energía son un cuento de adas; etc.etc. Lo cierto es que que chile nos invade  y no hacemos nada. Los mismos acontecimientos del 79.
• Ahí va la nota publicada por el Diario el Men.

CHILENOS COMPRAN TIERRAS PRODUCTIVAS EN EL PERÚ

Grandes extensiones de tierra de cultivo son adquiridas por consorcios chilenos en el Perú.

MEN 30-4-2012

A cada minuto Chile realiza operaciones dentro de su filosofía y estrategia de expansionismo dentro del territorio peruano. Su conquista la realiza a través de los capitales que introducen en la economía peruana, en la adquisición de acciones en consorcios nacionales debilitados por la inercia de empresarios peruanos y, a través de numerosos felipillos, de aquellos presidentes, ministros, funcionarios y políticos a los que no se les debe llamar peruanos, porque todo su accionar más semeja a la de un traidor que a la de una autoridad que debe defender los intereses de la nación.

 Chile ya está presente en el amplio norte del Perú, conquistando tierra fértil para ampliar su capacidad exportadora de frutas y productos agroindustriales (caso Piura y Chiclayo). Va tentando en las tierras plenas de sol en Ica para fortalecer su producción de pisco y se encamina a conquistar la selva con la extracción de la madera o quizá con el temperamento de instalar una planta de papel, tan expertos en su producción. Numerosas empresas pero por sobretodo empresa chilena Verfrut empezó con 1,200 hectáreas en Piura y ahora busca tierras en Ica y Chiclayo. Otra empresa es la Río Blanco, que está asociándose con agricultores del norte a los que termina por devorárselos.
¿Puerto de Paita chileno?
Chile mira a Brasil como socio, operando desde territorio peruano. Los empresarios chilenos les ganan en iniciativa a los inversionistas locales como si fuese un partido de barajas engañosas. Alientan una carretera por el norte del país que cruce los andes y llegue hasta Brasil, pues ya cuentan con el control del puerto de Paita por donde podrán abastecer de productos chinos al gigante vecino del este.
Pero eso solo es la parte comercial, la penetración inteligente y sistemática de los chilenos, mientras que los peruanos parecemos que nos hemos quedado solo en cocineros, sin la posibilidad de ser más creativos en otros campos de la industria y producción.
No solo frutas, ahora armas
A esta patética realidad de sumisión económica y financiera a los capitales del sur, se suma la compra de armas en más de 4 mil millones de dólares que Chile tiene contante y sonante entre sus manos para adquirir más aviones cazabombarderos, más aviones espías no tripulados y todas las armas que le sirvan para mantener bajo la sombra al Perú.
Esta situación, aún imperceptible para muchos peruanos incautos, se hará grandemente notoria cuando el Tribunal de la Haya, dentro del presente año, o el próximo a lo sumo, emita la resolución a favor de Perú en su reclamo por la delimitación Marítima.
Chile sigue armándose y burlándose de los acuerdos de la OEA, el UNASUR, y de la pérdida de tiempo de las negociaciones bilaterales (la famosa Homologación de Alan Wagner).
La UNASUR, tiene ahí, una especial importancia, con el Consejo de Defensa, para poner límites efectivos a esa carrera armamentista imparable de Chile, que pone en grave riesgo la paz en nuestra región.
Una buena manera de bajar las tensiones, puede ser, en nuestro caso, renegociar el TLC, con Chile y las inversiones de sus empresarios, condicionado a la reducción de sus gastos militares, porque nosotros mismos estamos alimentando a un potencial enemigo. Y no sería la primera vez.

• El riesgo permanente de otra conflagración bélica con Chile, cual piedra en el zapato, no nos puede quitar el sueño, y menos nuestras legítimas aspiraciones a seguir nuestro crecimiento económico, pero en paz. No podemos distraer recursos destinados para la Inclusión Social, en alimentar a los traficantes de armas, que solo son Mercaderes de la Muerte.