Domingo, 12 de julio de 2009
LIMA NORTE PERU CONFERENCIA
INGRESO LIBRE
La Cantuta: 17 años en la lucha contra la impunidadFecha y hora: Martes 14 de julio - 5:30pm
Lugar: Local del SINATBAN-Jr. Madre de Dios 281, Santa Beatriz (Espalda del Estadio Nacional)
Conferencia:*Dr. Avelino Guillen
Fiscal Supremo Adjunto - Juicio a Fujimori
*Ulises Cantoral
Familiar del caso Saúl Cantoral
*Jose Carlos Medina
Integración Estudiantil*Artista de YUYACHKANI
Además...
Ofrenda tu arte por Cantuta:Música, Canto popular, y exposición de arte
Chalena Vazques
Margot Palomino
Qari Contreras ...
Publicado en el diario "La Primera"
Anuncian tributo a víctimas de matanzaCon una romería al cementerio El Ángel, un acto litúrgico en la iglesia de La Recoleta y la conferencia denominada “La Cantuta: 17 años en lucha contra la impunidad”, en la que participará el fiscal supremo adjunto Avelino Guillén, será recordado el execrable asesinato de nueve estudiantes y un profesor de la universidad Enrique Guzmán y Valle, perpetrado por el Grupo Colina, durante la dictadura de Alberto Fujimori.En la conferencia, que se realizará el martes 14 a las 5 y 30 de la tarde, también participarán familiares de los estudiantes asesinados por miembros del Grupo Colina al mando del entonces mayor EP Santiago Martin Rivas, que los incineraron y enterraron clandestinamente. Los restos fueron hallados en 1993...
TRAS 17 AÑOS DE LUCHA… EL LEGADO CANTUTA
El 18 de Julio de 1992, un destacamento de asesinos, integrados por agentes de inteligencia del ejército, comandados por Santiago Martin Rivas y con la protección de la dictadura de Alberto Fujimori; ingresaron a la Universidad Nacional de Educación Enrique Guzmán y Valle, La Cantuta (bajo protección militar desde mayo de 1991); para secuestrar, asesinar y desaparecer a nueve estudiantes y un maestro quienes estaban descansando en las viviendas universitarias.
Nuestros familiares estuvieron desaparecidos hasta julio de 1993, cuando desde la tierra donde los enterraron por tercera vez, después de quemarlos; aparecieron para señalar a sus asesinos, negándose a ser olvidados. La historia del largo trajinar de los familiares para conocer la verdad de los hechos y la ansiada justicia ha sido difícil, llena de incomprensiones, de estigmatizaciones, de abandono por parte de un Estado que decidió proteger a los asesinos para no reconocer su propia responsabilidad y de pretender que todos olvidemos estas muertes con las leyes de amnistía. Hemos sido capaces de mantenernos unidos y firmes en un compromiso que nos planteamos desde ese 18 de julio, ganarle a la muerte a través de nuestra memoria y hacer respetar nuestro derecho a la justicia caiga quien caiga.
En septiembre del 2007, la Corte Suprema Chilena decidió extraditar a Alberto Fujimori por algunas de las graves violaciones a los derechos humanos que se cometieron durante su dictadura, entre ellas, el crimen contra nuestros familiares. La justicia esperada durante 15 años y arrancada con plantones, movilizaciones, vigilias, denuncias; con gritos en las calles, lágrimas que marcaron nuestro rostro a través del tiempo y la solidaridad de muchas personas se hacía real, se convertía en algo posible.
Más de un año después de un largo juicio, el 07 de abril del 2009, la Sala especial de la Corte Suprema presidida por el doctor César San Martín sentenció a Alberto Fujimori a 25 años de prisión por la responsabilidad como autor mediato en la comisión de los delitos de homicidio calificado y asesinato; y que constituyen crímenes contra la humanidad; demostrando que la voluntad de hacer justicia para las víctimas de esta violencia pasa por el profesionalismo, el respeto y el atrevimiento de los magistrados a asumir esta responsabilidad. Esta sentencia debe ser considerada como un documento clave para arreglar las cuentas con el pasado y afirmar el espacio democrático de verdad y justicia que el Perú necesita, pues hace constar, terminantemente, que los agraviados no eran terroristas.
Tras el fallo histórico seguimos vigilantes de la decisión de la Corte Suprema, confiados en que la justicia no puede retroceder hacia la impunidad una vez más, sino ser el gesto de reconciliación entre el Estado y las víctimas respetando nuestro derecho a la verdad, a la justicia, a la memoria y a la dignidad. Así como este 02 de julio la Sala de la Corte Suprema ratificó la sentencia condenatoria contra los autores directos en el caso Cantuta.
Como Coordinadora contra la Impunidad seguimos tercos en la lucha contra toda forma de protección a los asesinos; nuestra perseverancia es también un aporte a la construcción del país diferente con el que todos soñamos; con respeto, con igualdad y sin impunidad. Convocamos a todos a hacer nuestra esta lucha contra la impunidad.
Lugar: Local del SINATBAN-Jr. Madre de Dios 281, Santa Beatriz (Espalda del Estadio Nacional)
Conferencia:*Dr. Avelino Guillen
Fiscal Supremo Adjunto - Juicio a Fujimori
*Ulises Cantoral
Familiar del caso Saúl Cantoral
*Jose Carlos Medina
Integración Estudiantil*Artista de YUYACHKANI
Además...
Ofrenda tu arte por Cantuta:Música, Canto popular, y exposición de arte
Chalena Vazques
Margot Palomino
Qari Contreras ...
Publicado en el diario "La Primera"
Anuncian tributo a víctimas de matanzaCon una romería al cementerio El Ángel, un acto litúrgico en la iglesia de La Recoleta y la conferencia denominada “La Cantuta: 17 años en lucha contra la impunidad”, en la que participará el fiscal supremo adjunto Avelino Guillén, será recordado el execrable asesinato de nueve estudiantes y un profesor de la universidad Enrique Guzmán y Valle, perpetrado por el Grupo Colina, durante la dictadura de Alberto Fujimori.En la conferencia, que se realizará el martes 14 a las 5 y 30 de la tarde, también participarán familiares de los estudiantes asesinados por miembros del Grupo Colina al mando del entonces mayor EP Santiago Martin Rivas, que los incineraron y enterraron clandestinamente. Los restos fueron hallados en 1993...
TRAS 17 AÑOS DE LUCHA… EL LEGADO CANTUTA
El 18 de Julio de 1992, un destacamento de asesinos, integrados por agentes de inteligencia del ejército, comandados por Santiago Martin Rivas y con la protección de la dictadura de Alberto Fujimori; ingresaron a la Universidad Nacional de Educación Enrique Guzmán y Valle, La Cantuta (bajo protección militar desde mayo de 1991); para secuestrar, asesinar y desaparecer a nueve estudiantes y un maestro quienes estaban descansando en las viviendas universitarias.
Nuestros familiares estuvieron desaparecidos hasta julio de 1993, cuando desde la tierra donde los enterraron por tercera vez, después de quemarlos; aparecieron para señalar a sus asesinos, negándose a ser olvidados. La historia del largo trajinar de los familiares para conocer la verdad de los hechos y la ansiada justicia ha sido difícil, llena de incomprensiones, de estigmatizaciones, de abandono por parte de un Estado que decidió proteger a los asesinos para no reconocer su propia responsabilidad y de pretender que todos olvidemos estas muertes con las leyes de amnistía. Hemos sido capaces de mantenernos unidos y firmes en un compromiso que nos planteamos desde ese 18 de julio, ganarle a la muerte a través de nuestra memoria y hacer respetar nuestro derecho a la justicia caiga quien caiga.
En septiembre del 2007, la Corte Suprema Chilena decidió extraditar a Alberto Fujimori por algunas de las graves violaciones a los derechos humanos que se cometieron durante su dictadura, entre ellas, el crimen contra nuestros familiares. La justicia esperada durante 15 años y arrancada con plantones, movilizaciones, vigilias, denuncias; con gritos en las calles, lágrimas que marcaron nuestro rostro a través del tiempo y la solidaridad de muchas personas se hacía real, se convertía en algo posible.
Más de un año después de un largo juicio, el 07 de abril del 2009, la Sala especial de la Corte Suprema presidida por el doctor César San Martín sentenció a Alberto Fujimori a 25 años de prisión por la responsabilidad como autor mediato en la comisión de los delitos de homicidio calificado y asesinato; y que constituyen crímenes contra la humanidad; demostrando que la voluntad de hacer justicia para las víctimas de esta violencia pasa por el profesionalismo, el respeto y el atrevimiento de los magistrados a asumir esta responsabilidad. Esta sentencia debe ser considerada como un documento clave para arreglar las cuentas con el pasado y afirmar el espacio democrático de verdad y justicia que el Perú necesita, pues hace constar, terminantemente, que los agraviados no eran terroristas.
Tras el fallo histórico seguimos vigilantes de la decisión de la Corte Suprema, confiados en que la justicia no puede retroceder hacia la impunidad una vez más, sino ser el gesto de reconciliación entre el Estado y las víctimas respetando nuestro derecho a la verdad, a la justicia, a la memoria y a la dignidad. Así como este 02 de julio la Sala de la Corte Suprema ratificó la sentencia condenatoria contra los autores directos en el caso Cantuta.
Como Coordinadora contra la Impunidad seguimos tercos en la lucha contra toda forma de protección a los asesinos; nuestra perseverancia es también un aporte a la construcción del país diferente con el que todos soñamos; con respeto, con igualdad y sin impunidad. Convocamos a todos a hacer nuestra esta lucha contra la impunidad.
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