SALIERON A COMBATIR UN INCENDIO Y NO REGRESARON
La realidad se impone: nacemos y morimos y cuando esto ocurre no
lo aceptamos, menos si el fatal desenlace fue como los ocurrido a
estos tres valerosos bomberos que
salieron para salvar vidas que no encontraron y no regresaron.
“Nosotros somos hermanos, somos una hermandad a lo largo de todo
al país. Estos bomberos han entrado para salvar vidas y finalmente ofrendaron
sus vidas.
"Es muy triste. Nunca nos había pasado, en los últimos 80 años no teníamos una pérdida como esta”, declaró en medio de lágrimas César García, comandante del Cuerpo General de Bomberos.
Por otro lado, escribía Heraclides Del Castillo: “No es el
momento de buscar culpables ni de recriminar nada, es el momento de guardar
respeto y de honrar la memoria de estos tres bomberos héroes, su muerte afecta
a toda la sociedad en su conjunto y hasta quizás todos somos culpables de ella.
Los hombres de rojo que en un acto de generosidad extrema ofrecen su
tranquilidad familiar, sus horas de merecido descanso y hasta su vida para
cuidarnos no merecen vivir ni menos morir así. No merecen vivir huérfanos del
apoyo del Estado que somos todos nosotros, no merecen nuestras incontables
muestras de irrespeto cuando llamamos por gusto al número de emergencias, no
merecen trabajar con equipos que no funcionan, no merecen nuestras burlas ni
menos nuestros chistes apendejados. Han muerto tres héroes y con su muerte, la
poca inocencia que aún le quedaba a la sociedad peruana también a partido, no
merecemos ni llorar por ellos, los criminales no lloran a sus muertos. Piensen
por un momento en la familia de estos tres bomberos, en sus hijos, ¿cómo se le
puede explicar a un niño que su padre a muerto por apagar un incendio ajeno,
por trabajar desprotegido y en forma gratuita por ayudar a otros, como decirle
a una niña que ha quedado huérfana, que a su padre se le ocurrió no velar su
sueño, solo para ir a arriesgar su vida por nadie? Han muerto tres bomberos
pero han nacido tres estrellas que desde el cielo van seguir alumbrando a sus
compañeros y van a seguir velando por Lima y su gente, a quien tanto amaron y
por quien entregaron su vida entera. Mi más grande homenaje a ellos” finalizo..
"Es muy triste. Nunca nos había pasado, en los últimos 80 años no teníamos una pérdida como esta”, declaró en medio de lágrimas César García, comandante del Cuerpo General de Bomberos.
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